En el barrio donde creció mi padre, las fiestas populares de la
iglesia eran organizadas por los llamados pajareros, personas que se
dedican a vender pájaros. Al pasar de los años por diversas razones
estos dejaron de hacerlo.
En una historia
aparte mis tías, hermanas de mi padre, son adeptas a tener pájaros
como mascotas, por sus cantos y sus colores.
Al realizarse este concurso la sede, que también es la secretaria de
cultura del estado de Querétaro, es parte de la iglesia del barrio
de donde creció mi padre, donde ayudaban mis tías y mi padre fue
monaguillo, así que como pequeño homenaje a esos recuerdos realice
junto a mi equipo esta Catrina Pajarera, a la cuan en realidad no le
gusta tener a las aves encerradas y mejor las mantiene libres.
Nota: Mi tía mas adepta a tener aves se enfermo, al no poder cuidar
sus aves y no recibir mucha ayuda de sus familiares cercanos se dio
cuenta que tenerlas encerradas no era productivo, y decidio ya no
tener más, y ahora le gusta verlas libres.
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